El día pintaba algo nublado, por lo que convencí a mi familia de hacer una visita a la sierra minera de Cartagena- La Unión, un lugar el cual tiene una belleza extraña, una sierra desolada con poca vegetación rodeada de cortas y escombreras, con gran variedad de colores.
La primera parada decidimos hacerla en la corta Brunita, famosa porque se pueden encontrar Vivianitas, algo que ahora es casi imposible. Ya iba con la idea de que no iba a encontrar gran cosa, pero solo visitar esta espectacular corta, merecía la pena la visita. Lo que más me llamaba la atención su gran lago, con su color rojizo y acidificadas por la pirita.
Después nos dirigimos hacia la playa de la Cola del Caballo, estuve poco tiempo, ya que para bajar a la playa hay que bajar por un desfiladero que es algo complicado, no por mí, pero si por mi familia. Así que baje el desfiladero yo solo hacia la playa, cuando llegue al fin, me quede asombrado, con su arena negra y sus brillos dorados, también de estar entre dos acantilados. Me dirigí a la Mina Las Gaviotas, en la misma orilla de la playa. Entre un poco en su interior, más bien en plan de reconocimiento y me quede observando sus diferentes mineralizaciones, pude observar baritas, algún yeso de poco tamaño y en la misma entrada en una pared, cristalizaciones de siderita. Saque unas muestras para mi colección y me dirigí de vuelta al coche.
Como aún era temprano, nos dirigimos hacia el Estrecho de San Gines, donde saliendo del pueblo se encuentra la mina Precaución. Ya estuve el pasado mes de marzo, pero quería que mi hermana la viera, ya que esta mina no resulta muy difícil de bajar y de encontrar minerales como, calcitas, calcofanitas, goethita, y como el mineral estrella de esta mina la hemimorfita. Bajamos por su escalera hacia las galerías, hicimos unas fotos y sacamos algunas muestras.
Y así terminamos este día de minas, dándonos un baño en las playas de la Manga.
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